El Gobierno del Perú aprobó el Decreto Supremo N.° 013-2025-PRODUCE, que modifica el Reglamento de Gestión Ambiental de los Subsectores Pesca y Acuicultura. Esta actualización fortalece la sostenibilidad y competitividad del sector, alineando sus procesos con el Sistema Nacional de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA). Con un marco regulatorio más ágil y eficiente, se busca impulsar inversiones responsables, garantizar la protección de los ecosistemas acuáticos y promover prácticas productivas modernas y sostenibles.
Principales cambios en la gestión ambiental pesquera y acuícola
El nuevo reglamento introduce mejoras sustanciales para el sector pesca y acuicultura, optimizando los procedimientos de evaluación ambiental con reducción de cargas y plazos. También establece mecanismos expeditos para atender emergencias y simplifica procesos para proyectos en terrenos públicos, comunales o de propiedad compartida, eliminando requisitos sin valor ambiental.
Entre los avances más relevantes se incluyen:
- Simplificación de trámites para proyectos en áreas públicas y comunales.
- Impulso a la descarbonización mediante energías renovables y combustibles menos contaminantes en plantas industriales pesqueras.
- Facilidades para la formalización ambiental de actividades ampliadas o modificadas sin evaluación previa, con un plazo de dos años para regularizarse mediante un PAMA.
- Criterios unificados para integrar instrumentos de gestión ambiental en concesiones acuícolas que compartan espacio geográfico.
- Mecanismos rápidos de atención ante emergencias ambientales que afecten la salud pública o el ecosistema.
- Definición de acciones que no requieren modificar el instrumento de gestión ambiental, favoreciendo inversiones sin sacrificar estándares ambientales.
Declaraciones y alcance de la reforma
El viceministro de Pesca y Acuicultura, Jesús Barrientos, afirmó que “esta reforma normativa elimina barreras innecesarias, fortalecido la fiscalización y creado condiciones para que la inversión privada se desarrolle con responsabilidad y sostenibilidad”.
Asimismo, destacó que “el nuevo reglamento no solo mejora la eficiencia administrativa, sino que promueve una cultura de cumplimiento ambiental basada en la prevención, la transparencia y la corresponsabilidad. Es una herramienta fundamental para consolidar una pesca y acuicultura competitivas y alineadas con los desafíos del cambio climático”.
La modificación del reglamento fue elaborada por el Ministerio de la Producción en coordinación con el Ministerio del Ambiente, con participación técnica de especialistas públicos y privados. Su aplicación no generará gastos adicionales al presupuesto nacional.
La Dirección General de Asuntos Ambientales Pesqueros y Acuícolas será la encargada de socializar el Decreto Supremo mediante eventos de difusión, reafirmando el compromiso del país con la protección de los recursos hidrobiológicos y la innovación en la gestión ambiental.
Fuente: Produce
