En 2024, más de 3.8 millones de peruanos tuvo una segunda ocupación, conocida como «segunda chamba», según un informe del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP). Esta cifra representa al 21% de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada del país. El estudio, basado en datos oficiales del INEI, revela que esta tendencia responde principalmente a la necesidad de mejorar los ingresos familiares ante los bajos sueldos del empleo principal. Piura figura como una de las regiones con mayor concentración de trabajadores con ocupación secundaria.
Segunda ocupación: alternativa ante ingresos insuficientes
Según el estudio “Mi Segunda Chamba: La ocupación secundaria en el Perú”, elaborado por el IEDEP de la Cámara de Comercio de Lima, 3.1 millones de peruanos tienen una segunda ocupación fija, mientras que 645 mil optan por trabajos temporales o “cachuelos”.
Óscar Chávez, jefe del IEDEP, explicó que los ingresos insuficientes son la principal razón de esta tendencia. Sin embargo, también hay un creciente interés por financiar estudios, ahorrar o iniciar emprendimientos. “Más del 21% de los trabajadores necesita diversificar sus ingresos para sostener la economía familiar”, señaló el economista.

Este fenómeno no es reciente. Se ha mantenido estable en los últimos años, reflejando la fragilidad del mercado laboral peruano y la limitada capacidad de una sola fuente laboral para cubrir el costo de vida.
Piura entre las regiones con más trabajadores con segunda chamba
El 65.6% de quienes tienen un segundo empleo vive en zonas urbanas, aunque también se observa una alta incidencia en zonas rurales debido a la inestabilidad del empleo agrícola. A nivel regional, Piura concentra el 8% del total nacional, ubicándose entre las regiones con mayor presencia de trabajadores con segunda ocupación, junto con Lima (18%) y Cajamarca (8.2%).
Por grupo etario, el 38.5% de estos trabajadores tiene entre 30 y 44 años, una etapa caracterizada por mayores responsabilidades económicas y familiares. A pesar del esfuerzo, el 22.9% de los trabajadores con doble ocupación sigue en situación de pobreza, afectando a más de 868 mil personas.
En cuanto al nivel educativo, el 72.3% solo cuenta con educación básica, mientras que solo el 27.7% ha alcanzado educación superior, lo que refleja una brecha formativa en quienes deben recurrir a múltiples trabajos.
Informalidad y autoempleo marcan la segunda ocupación en Perú
El estudio señala que el 89% de los trabajadores con segunda ocupación pertenece al sector informal, lo que limita su acceso a beneficios laborales y seguridad social. Además, el 46.4% trabaja de manera independiente y el 31.5% fuera del marco de relaciones formales de empleo, predominando el autoempleo.
En cuanto a sectores económicos, las actividades con mayor concentración de segunda ocupación son: Agropecuario (30.9%), Comercio (17%) y Otros Servicios (31.4%), donde destacan Transporte (5.8%) y Alojamiento y Restaurantes (7.6%).
Este patrón se desarrolla mayormente en microempresas con menos de 20 trabajadores (95.9%), lo que refuerza la alta dependencia del empleo informal y de baja productividad.
Brecha de género y distribución sectorial de la segunda chamba
Aunque hay más hombres (2.1 millones) que mujeres (1.7 millones) con segunda ocupación, la distribución sectorial presenta diferencias marcadas. Las mujeres se concentran en actividades como Alojamiento y Restaurantes (68.7%), Manufactura (60.1%), Comercio (56.5%) y Otros Servicios (55.4%).
Por el contrario, los hombres predominan en sectores como Construcción (98.5%), Transporte y Almacenamiento (95%), Minería (94.5%) y Telecomunicaciones (92.5%), rubros que requieren mayor esfuerzo físico y jornadas extensas.
En términos de ingresos, una persona con una sola ocupación gana en promedio S/ 1,591 mensuales, mientras que quienes tienen una segunda ocupación fija perciben S/ 1,730 (sumando ambas fuentes). En el caso de trabajos temporales, el ingreso promedio es de S/ 1,352.