La empresa peruana Leather Lab ha logrado posicionarse como una de las iniciativas más innovadoras de América Latina gracias a su enfoque en sostenibilidad y economía circular. Su propuesta de biocuero vegano, elaborado a partir de residuos agroindustriales, despertó gran interés tanto en el mercado nacional como internacional.
Reconocimiento en América Latina y Europa
Uno de los logros más recientes de la startup fue su inclusión en el E-book de Mejores Prácticas en Economía Circular, una iniciativa promovida por la Federación de Industrias del Estado de São Paulo (FIESP) y la Confederación Nacional de la Industria (CNI) de Brasil. Este reconocimiento permitirá posicionar su modelo de producción como referente regional en procesos industriales sostenibles.
Asimismo, a Leather Lab se le seleccionó entre más de 250 postulantes para formar parte del programa Puente de Talento Madrid – Madrid Innovation, desarrollado en alianza con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Como parte de esta iniciativa, sus representantes participarán en una pasantía de ocho semanas en España. Ahí, recibirán formación especializada en innovación empresarial por parte de la IE University, una de las escuelas de negocios más reconocidas de Europa.

Una alternativa sostenible al cuero animal
El corazón del proyecto de Leather Lab es el desarrollo de una alternativa ecológica al cuero tradicional, creada a partir de residuos orgánicos como palta, café, mango, naranja, maíz morado y tuna. Esta materia prima permite fabricar un biocuero duradero, resistente y amigable con el medio ambiente, libre de insumos contaminantes y sin recurrir al maltrato animal.
Los productos derivados —entre ellos bolsos, carteras y billeteras— ya están siendo comercializados en pequeñas escalas, con miras a una producción industrial en los próximos meses. La colección de prototipos se financió mediante fondos no reembolsables del programa ProInnóvate, impulsado por el Ministerio de la Producción (Produce).
Innovación con impacto ambiental positivo
El biocuero de Leather Lab se desarrolla bajo los principios de la economía circular, reduciendo significativamente la huella ecológica frente a la industria tradicional del cuero, que consume grandes volúmenes de agua y utiliza más de 300 kg de productos químicos por metro cúbico procesado.
Hasta el momento, el equipo desarrolló cinco fórmulas de biocuero con variaciones en textura, grosor y color, e identificado siete tipos de residuos agroindustriales como insumos potenciales para su fabricación. Esta diversificación no solo optimiza la producción, sino que amplía las posibilidades de personalización del material para distintas industrias.
Apuesta por el futuro del diseño sostenible
Leather Lab responde a una tendencia creciente a nivel global: el uso de materiales ecoamigables y éticos en el diseño de moda, accesorios y productos industriales. Con una visión clara de sostenibilidad, innovación y responsabilidad social, esta startup se consolida como un actor clave en el impulso de la textilería vegana y la revalorización de residuos agrícolas.