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Si has notado un descuento por “renta de quinta categoría” en tu boleta de trabajo y te preguntas de qué se trata, aquí encontrarás una explicación detallada.

Definición de la renta de quinta categoría

La renta de quinta categoría, también conocida como renta de trabajo, es un impuesto anual al que están sujetos los trabajadores en relación de dependencia, es decir, aquellos que trabajan bajo contrato y supervisión de una empresa o institución. Este impuesto incluye salarios, bonificaciones, gratificaciones, comisiones y otros beneficios monetarios o en especie recibidos entre el 1 de enero y el 31 de diciembre.

Este tributo se aplica únicamente a trabajadores cuyos ingresos anuales superen las 7 Unidades Impositivas Tributarias (UIT). Para el año 2023, correspondió S/ 34,650, monto a partir del cual se realiza la retención del Impuesto a la Renta (IR).

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¿Cómo saber si estás sujeto a renta de quinta categoría?

Generalmente, este impuesto se aplica a quienes están en planilla, con un horario y supervisión definidos, y sujetos a un reglamento interno. Esto incluye a trabajadores de empresas privadas y empleados públicos en cargos permanentes o de contrato.

Tasas del Impuesto a la Renta de quinta categoría

El cálculo de este impuesto es progresivo y acumulativo, con tasas de 8%, 14%, 17%, 20% y 30%, que aumentan conforme al ingreso anual. La retención se aplica mensualmente y es responsabilidad de la empresa en la que trabajas. Por eso, puedes observar este descuento en tus boletas de pago.

Límite de ingresos para evitar la renta de quinta categoría en 2023

Para no estar sujeto a este impuesto, el ingreso anual debe ser inferior a 7 UIT. Si tus ingresos son inferiores a este monto, no tendrás retención de renta de quinta categoría.

¿Cómo solicitar la devolución de impuestos para rentas de cuarta y quinta categoría?

La ley peruana permite deducir ciertos gastos que generan una disminución en el impuesto a pagar. Entre estos, se incluyen consumos en restaurantes, bares, hoteles, y servicios profesionales de médicos, abogados y odontólogos. Puedes solicitar una devolución si presentas boletas de venta electrónicas con tu DNI y recibos por honorarios de estos servicios. El monto deducible anual no debe superar las 3 UIT.

Este proceso permite que ciertos gastos en servicios autorizados por ley disminuyan el monto imponible, generando un alivio fiscal al final del año.

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