En la coyuntura actual, una de las exigencias empresariales es la innovación. Ser innovador ayuda a generar nuevos productos, procesos o servicios que son útiles para otros. En esta nota, te presentamos las claves estratégicas para generar ideas innovadoras.
Es preciso señalar, que la innovación también puede darse introduciendo mejoras efectivas a algo ya creado.
Ideas innovadoras
Identificar el problema u oportunidad Debes identificar las áreas con oportunidades para la mejora o con debilidades en el futuro. Es importante tener claro el objetivo de la innovación, es decir, saber lo que se quiere lograr con esta iniciativa.
Hacer lluvia de ideas. Realiza una lluvia de ideas. Busca obtener muchas opiniones para evaluar posibles soluciones. Necesitas la opinión de varias personas, así podrás complementar las idea de otros. El único objetivo en esta etapa es utilizar toda la creatividad posible.
Realizar un análisis. Ahora las ideas para ver si son razonables y pertinentes. Para esto es importante tener claros los objetivos de la empresa, ya que según ello también se rechazará o aceptará alguna propuesta.
Este análisis no debe incluir solo los beneficios de la posible innovación, sino también las desventajas o consecuencias negativas de su posible implementación.
Implementar tu idea. Empieza por la planificación para luego poder llevar a cabo la innovación. La implementación es poner en práctica y hacer realidad la idea innovadora.
Evaluar la efectividad de la idea. Evalúa qué tan efectiva es, si su rendimiento es el adecuado y su aceptación entre los consumidores. Aquí se busca saber si se logró lo que se esperaba y cómo funciona.
Fomenta la retroalimentación. En esta etapa se puede hacer las modificaciones necesarias para que el producto, proceso o servicio sea realmente innovador y que los consumidores se sientan satisfechos.
¿Qué pasa si la idea no funciona?
Cuando una idea no funciona, no quiere decir que esta sea mala, sino que puede estar siendo implementada de manera equivocada. Lo que debes tener es una reacción rápida y no dejar que un pequeño problema se convierta en uno mayor.
