De acuerdo con la Cámara de Comercio de Lima (CCL), en los dos últimos años en Perú, más de 135 mil micro y pequeñas empresas (mipymes) cerraron debido a la crisis sanitaria y política vivida. Sumado a ello, este año las intensas lluvias y tormentas eléctricas ocasionadas por el Fenómeno de El Niño han afectado a sectores productivos como pesca, agricultura, construcción, comercio y manufactura del norte del país.
Las pérdidas estimadas causadas por el Fenómeno de El Niño serían aproximadamente 13 mil millones de soles, conforme a un análisis de Credicorp Capital Asset Management.
“Ante estas situaciones, las empresas de planificación de recursos empresariales (ERP) se convierten en una herramienta valiosa que ayuda a las empresas a tomar decisiones informadas y gestionar mejor sus operaciones a partir de datos concretos que eviten el cierre del negocio”, explicó el gerente comercial de Kame ERP, Juan Lastra.
Así, frente a la coyuntura que vive el país, el ejecutivo brinda cinco consejos para evitar la liquidación de una compañía producto de sus deudas.
1) Establecer y proyectar tu capacidad financiera
Se tienen que conocer las posibilidades que se tendrán para cubrir pagos, para invertir en el corto y largo plazo. Así como, conocer el punto de equilibrio o, en otras palabras, saber cuánto es el mínimo que se necesita vender y también recaudar para cubrir los costos fijos, e idealmente tener planes de contingencia si no se logran los objetivos comerciales. Por ejemplo: tener líneas de capital de trabajo bancarias disponibles para evitar tener que recurrir a otras fuentes de financiamiento más costosas.
2) Un plan claro ilumina el camino
Generalmente, los emprendimientos surgen rodeados de mucho entusiasmo y no tanta planificación, con el clásico “ahí vamos viendo”. Sin embargo, antes de empezar, es esencial tener presentes los datos clave para lanzarse a un negocio específico, idealmente con el mayor detalle posible. Por ejemplo, en el caso de que se comercialicen productos, es útil realzar el presupuesto con los valores y cantidades, no sólo con el monto de la venta total. De esta forma, se podrá detectar más fácilmente las posibles desviaciones del plan.
3) No olvidar los impuestos
Se debe considerar el pago de los impuestos como algo necesario para que el negocio funcione, porque todos los meses se debe contar con los flujos necesarios para realizar el pago.
Si bien el IGV puede estar considerado en el precio de los productos, la pregunta es, ¿la empresa está preparada para pagar este impuesto si los clientes no han pagado?
Además, en términos generales y simples, la empresa anualmente pagará el 27% de la utilidad (ventas menos costos y gastos) obtenida el año anterior. Más aún si por algún motivo se retrasa el pago, se deberá pagar el impuesto más multas e intereses.
4) No puedes solo con todo
Uno de los grandes errores que cometen los emprendedores es creer que pueden manejar solos todas las situaciones que se presenten. Por el contrario, las empresas que logran el éxito requieren de buenos socios y/o equipos de trabajo, dispuestos a apoyarse en los malos momentos y a mantener los pies sobre la tierra cuando las cosas van bien. Asimismo, también deben saber aprovechar las oportunidades que se presenten en el mercado.
5) Utiliza la tecnología
La utilización de la tecnología aumenta exponencialmente la productividad y es uno de los factores más relevantes en el contexto empresarial, ya que tiene la capacidad de aportar en muchos ámbitos y marcar la diferencia con la competencia. Además, la tecnología tiene la característica de hacerse cada vez más accesible o bajar sus precios, con lo que las pymes también pueden tener acceso.
Así como el uso de tecnología para mejorar los procesos de la empresa es muy útil, también se puede utilizar para responder de forma inmediata, idealmente en línea, preguntas clave del negocio tales como ¿gano o pierdo dinero?, ¿qué producto es más rentable?, ¿quién es el mejor vendedor?, ¿cuál es la línea de negocio con mayor utilidad?, ¿cuánto me deben los clientes? Hoy en día no gana el pez más grande, sino el que se mueve más rápido y para ello se necesita información de calidad, ordenada y de fácil acceso.